Esta tendencia de formación en línea para llevar el e-learning en nuestros dispositivos no puede ser utilizada a la ligera, sin objetivos ni metas que permitan su correcta aplicación.
Se debe recordar que las principales causas por la que los sistemas e-learning han fracaso en muchos ambientes educativos es por la errónea apreciación de que la tecnología reemplaza al docente, que al automatizar los contenidos se vuelve inútil la presencia del facilitador; y esto es lo que ha llevado a la deserción y desmotivación de los participantes por encontrarse con procesos fríos, automáticos y aislados que son únicamente valorados por su puntaje cuantitativo.
No podemos olvidar que la incursión de la tecnología en el proceso de enseñanza aprendizaje no constituye otra cosa que una herramienta de soporte para difundir el conocimiento de diferentes maneras, motivando la participación y creatividad de los estudiantes.
Si no aplicamos un esquema adecuado que regule, norme y oriente la utilización del m-learning, este puede ser tomado como un juego sin importancia o puede volverse una actividad desalentadora y tediosa para los participantes si se ven envueltos en una tensión permanente de actividades que desarrollar por estos medios.
La metodología PACIE juega un papel fundamental en la correcta fusión de tecnología y pedagogía para una enseñanza de calidad, donde el factor humano juega un rol primordial, vivenciándose un ambiente de calidad con calidez desde el docente como motor del proceso hacia sus participantes y de estos con motivación y creatividad.
De esta manera las cinco fases de esta metodología pueden ser aplicadas así:
Presencia. Que guarde una estrecha relación con la imagen corporativa de la entidad educativa, a fin de que los participantes independientemente de la latitud geográfica en la que se encuentren, el horario al que accedan o la actividad que se encuentren cumpliendo, tengan siempre presente su sello distintivo sobre su centro de formación, manteniéndose en cada actividad siempre un esquema que caracterice a la institución como facilitadora del conocimiento y que incursiona y motiva la aplicación de TIC´s en la educación.
Alcance. Que permita tener definidos claramente los objetivos de la utilización del m-learning, las metas que se busca alcanzar y los estándares de calidad que se necesita tener o mantener. De esta manera se establecerá los lineamientos que rijan el uso correcto de esta herramienta, estando plenamente identificados los límites, aplicaciones y finalidad que permitan determinar ¿hasta dónde se puede llegar?, ¿Qué se espera conseguir con determinada actividad?, ¿Es redundante, complementaria, innecesaria o fortalecedora de conocimientos determinada actividad prevista para el m-learning?, ¿Están los participantes en condiciones de acceder a la utilización de esta herramienta?, ¿Su utilización va a ser un aporte al proceso formativo o se volverá una barrera?.
Capacitación. El uso del m-learning debe ser orientado a conseguir un objetivo claro de utilizarlo como una herramienta de soporte al proceso de enseñanza, el cual no puede convertirse en un elemento frustrante y desmotivador del participantes, por lo que el docente debe estar preparado para su correcta utilización y aplicación. En este sentido el docente debe capacitarse de forma permanente para poder enlazar los procesos de enseñanza con la utilización de las TIC`s, así como ir descubriendo nuevas herramientas, recursos, aplicaciones y demás bondades que ofrece de forma constante la tecnología, a fin de que las mismas puedan ser implementadas de forma eficaz en los sistemas de enseñanza.
Integración. Que permita un trabajo colaborativo entre participantes, para solución de casos, apoyo, organización de eventos y coordinación de fechas, mediante la utilización de sistemas síncronos o asíncronos de comunicación como foros, chats, redes sociales, etc. Todos estos procesos deben ser desarrollados con calidez, generando un aprendizaje grupal y armónico, donde se pueda constatar la capacidad de apoyar a los demás en el camino del aprendizaje.
Elearning. Fase indispensable cuando hablamos de m-learning ya que es justamente la que permite el acceso, oportuno a los contenidos y actividades, abriendo miles de puertas para acceder a la información y el conocimiento, a través de todos los recursos que la web ofrece.